♦♦♦♦CAPITULO
01♦♦♦♦
**Narrador
Externo**
Era
una fría mañana de invierno, en la mansión abandonada que todos en
el pueblo temían y que nadie se atrevía a entrar vivía un payaso
malvado. Este se alimentaba del miedo de los niños, los asesinaba
para comérselos, era un payaso despiadado que disfrutaba con el mal
que hacia.
Era por la mañana y Pennywise, (así se llama el payaso), estaba asomado a la gran ventana mirando hacia la calle, era la hora de la escuela, así que algunos niños pasaban por delante de su mansión, Pennywise estaba espiando detrás de las cortinas viejas, en su cara apareció una sonrisa cuando vio pasar por la calle a dos niños que caminaban a paso ligero. Todos los niños cuando pasaban por delante de esa mansión sentían terror y pasaban lo mas rápido que podían, Pennywise sentía ese miedo y le gustaba.
El payaso seguía asomado a la ventana mirando, para elegir su desayuno, pasaron dos niñas mas mayores, estas no le llamó la atención, él quería un niño mas pequeño, se quedó esperando pacientemente pero ya no pasaron mas niños, el payaso gruñó y se dirigió a las alcantarillas, bajó por el pozo que había en su sótano y se adentró en las alcantarillas, por allí caminó hasta llegar a una gran sala donde tenia varios cuerpos de niños flotando, el payaso se quedó mirando pensativo, tras unos minutos decidió que saldría a cazar mas niños.
Sonrió y salió de las alcantarillas, caminó por la calle, al llegar al parque sacó un manojo de globos rojos y se quedó allí plantado esperando a que algún niño curioso se acercara a él.
Tras unos minutos un chico pequeño de unos cinco años se acercó al payaso.
-Niño: ¿Me das un globo?.
Pennywise miró al niño y sonrió.
-Pennywise: Claro que si.
El payaso le dio un globo al niño, este lo agarró y sonrió.
-Niño: Gracias.-El niño soltó un gritito de alegría.
Pennywise miraba al niño muy serio, el niño al darse cuenta miró al payaso y retrocedió unos pasos.
-Niño: Gracias por el globo, yo ya me tengo que ir.
-Pennywise: ¿Tan pronto?.
Pennywise sonrió y se acercó al niño, el niño por su parte retrocedió asustado, eso hizo al payaso sonreír.
-Pennywise: ¿Me tienes miedo?.
-Niño: N...no.
-Pennywise: No mientas, noto tu miedo.
Pennywise agarró al niño del cuello y lo levantó hasta su altura.
-Pennywise: Sientes terror.
El niño daba patadas y gritaba.
-Niño: ¡Suéltame! ¡suéltame!.
El payaso sonrió y apretó mas al niño.
-Niño: Me haces daño.
-Pennywise: Shh callate.
El niño miraba aterrado al payaso, este sonrió y su cara se convirtió en la cara de un zombie deforme.
El niño lo miró con los ojos muy abiertos y soltó un grito, Pennywise sonrió y se llevó al niño a las alcantarillas.
Una vez dentro de las alcantarillas, Pennywise miró al niño y tras unos segundos los ojos del niño quedaron blancos y flotó hacia los demás niños, Pennywise soltó una carcajada y salió de las alcantarillas a buscar a su próxima victima.
****
No muy lejos de ahí, en una casita pequeña, Kim se estaba preparando para ir al instituto, Kim era una chica de 18 años de pelo negro largo, ojos marrón oscuro y piel blanca.
Tras unos minutos, la chica ya estaba preparada para irse al instituto, así que se dirigió hacia la puerta de casa.
-Kim: ¡Mamá, me voy!.
-Mel: Okay hija, nos vemos luego.
-Kim: Si mamá.
La chica salió de casa y caminó por la calle, tras unos minutos pasó por delante de la mansión abandonada, miró hacia la gran casa y un escalofrío recorrió todo su cuerpo, la chica aceleró el paso y pasó lo mas rápido que pudo por allí delante.
Lo que no sabia Kim es que el payaso malvado la estaba observando a través de las cortinas, Pennywise sonrió al ver a la chica y se quedó mirando por la ventana.
Era por la mañana y Pennywise, (así se llama el payaso), estaba asomado a la gran ventana mirando hacia la calle, era la hora de la escuela, así que algunos niños pasaban por delante de su mansión, Pennywise estaba espiando detrás de las cortinas viejas, en su cara apareció una sonrisa cuando vio pasar por la calle a dos niños que caminaban a paso ligero. Todos los niños cuando pasaban por delante de esa mansión sentían terror y pasaban lo mas rápido que podían, Pennywise sentía ese miedo y le gustaba.
El payaso seguía asomado a la ventana mirando, para elegir su desayuno, pasaron dos niñas mas mayores, estas no le llamó la atención, él quería un niño mas pequeño, se quedó esperando pacientemente pero ya no pasaron mas niños, el payaso gruñó y se dirigió a las alcantarillas, bajó por el pozo que había en su sótano y se adentró en las alcantarillas, por allí caminó hasta llegar a una gran sala donde tenia varios cuerpos de niños flotando, el payaso se quedó mirando pensativo, tras unos minutos decidió que saldría a cazar mas niños.
Sonrió y salió de las alcantarillas, caminó por la calle, al llegar al parque sacó un manojo de globos rojos y se quedó allí plantado esperando a que algún niño curioso se acercara a él.
Tras unos minutos un chico pequeño de unos cinco años se acercó al payaso.
-Niño: ¿Me das un globo?.
Pennywise miró al niño y sonrió.
-Pennywise: Claro que si.
El payaso le dio un globo al niño, este lo agarró y sonrió.
-Niño: Gracias.-El niño soltó un gritito de alegría.
Pennywise miraba al niño muy serio, el niño al darse cuenta miró al payaso y retrocedió unos pasos.
-Niño: Gracias por el globo, yo ya me tengo que ir.
-Pennywise: ¿Tan pronto?.
Pennywise sonrió y se acercó al niño, el niño por su parte retrocedió asustado, eso hizo al payaso sonreír.
-Pennywise: ¿Me tienes miedo?.
-Niño: N...no.
-Pennywise: No mientas, noto tu miedo.
Pennywise agarró al niño del cuello y lo levantó hasta su altura.
-Pennywise: Sientes terror.
El niño daba patadas y gritaba.
-Niño: ¡Suéltame! ¡suéltame!.
El payaso sonrió y apretó mas al niño.
-Niño: Me haces daño.
-Pennywise: Shh callate.
El niño miraba aterrado al payaso, este sonrió y su cara se convirtió en la cara de un zombie deforme.
El niño lo miró con los ojos muy abiertos y soltó un grito, Pennywise sonrió y se llevó al niño a las alcantarillas.
Una vez dentro de las alcantarillas, Pennywise miró al niño y tras unos segundos los ojos del niño quedaron blancos y flotó hacia los demás niños, Pennywise soltó una carcajada y salió de las alcantarillas a buscar a su próxima victima.
****
No muy lejos de ahí, en una casita pequeña, Kim se estaba preparando para ir al instituto, Kim era una chica de 18 años de pelo negro largo, ojos marrón oscuro y piel blanca.
Tras unos minutos, la chica ya estaba preparada para irse al instituto, así que se dirigió hacia la puerta de casa.
-Kim: ¡Mamá, me voy!.
-Mel: Okay hija, nos vemos luego.
-Kim: Si mamá.
La chica salió de casa y caminó por la calle, tras unos minutos pasó por delante de la mansión abandonada, miró hacia la gran casa y un escalofrío recorrió todo su cuerpo, la chica aceleró el paso y pasó lo mas rápido que pudo por allí delante.
Lo que no sabia Kim es que el payaso malvado la estaba observando a través de las cortinas, Pennywise sonrió al ver a la chica y se quedó mirando por la ventana.
Kim avanzó
rápidamente y una vez hubo pasado la mansión suspiró aliviada ya
que le aterrorizaba pasar por ahí delante, en cierto modo a todos
los niños y niñas del pueblo les daba miedo pasar por ahí delante,
era una casa abandonada bastante tétrica.
Kim llegó al instituto y entró a clase, se sentó en su sitio y comenzó a sacar el estuche y cuaderno, unos minutos después llegó el profesor y comenzó la clase.
Las clases transcurrieron de forma normal para Kim, al sonar el timbre de las tres que indicaba el final de las clases, la chica recogió sus cosas y salió del instituto.
Kim iba caminando de vuelta a casa y para volver a casa tenia que pasar por delante de la dichosa casa abandonada, así que la chica comenzó a pasar por delante de la casa y entonces oyó un crujido, su mirada se posó en la gran mansión y se quedó helada al ver unos ojos que la observaban a través de las viejas cortinas.
-Kim: ¿Que es eso?.
Lo chica volvió a mirar hacia la ventana y ahí seguían esos extraños ojos, observándola fijamente, la chica sintió un fuerte escalofrío y salió corriendo alejándose de allí.
Pennywise al ver a la chica salir corriendo sonrió y se quedó mirando como la chica se alejaba corriendo.
-Pennywise: Si, corre pequeña, pero no vas a poder escapar de mi.
El payaso soltó una risotada que resonó por toda la mansión.
La chica antes de girar por la esquina de la calle se giró y miró hacia atrás, no vio nada ni nadie, así que siguió su camino de vuelta a casa.
**Narra Kim**
Llegué a casa bastante acelerada y asustada por lo que acababa de ver ¿que eran esos ojos?, puede que solo fueran imaginaciones mías, si eso será, creo que no debo de darle mas vueltas a lo que he visto, cerré la puerta, lancé mi mochila al sofá y me dirigí a la cocina.
-Kim: ¿Mamá?.
Al llegar a la cocina vi una nota pegada en la nevera con un imán, agarré la nota y la leí.
Kim llegó al instituto y entró a clase, se sentó en su sitio y comenzó a sacar el estuche y cuaderno, unos minutos después llegó el profesor y comenzó la clase.
Las clases transcurrieron de forma normal para Kim, al sonar el timbre de las tres que indicaba el final de las clases, la chica recogió sus cosas y salió del instituto.
Kim iba caminando de vuelta a casa y para volver a casa tenia que pasar por delante de la dichosa casa abandonada, así que la chica comenzó a pasar por delante de la casa y entonces oyó un crujido, su mirada se posó en la gran mansión y se quedó helada al ver unos ojos que la observaban a través de las viejas cortinas.
-Kim: ¿Que es eso?.
Lo chica volvió a mirar hacia la ventana y ahí seguían esos extraños ojos, observándola fijamente, la chica sintió un fuerte escalofrío y salió corriendo alejándose de allí.
Pennywise al ver a la chica salir corriendo sonrió y se quedó mirando como la chica se alejaba corriendo.
-Pennywise: Si, corre pequeña, pero no vas a poder escapar de mi.
El payaso soltó una risotada que resonó por toda la mansión.
La chica antes de girar por la esquina de la calle se giró y miró hacia atrás, no vio nada ni nadie, así que siguió su camino de vuelta a casa.
**Narra Kim**
Llegué a casa bastante acelerada y asustada por lo que acababa de ver ¿que eran esos ojos?, puede que solo fueran imaginaciones mías, si eso será, creo que no debo de darle mas vueltas a lo que he visto, cerré la puerta, lancé mi mochila al sofá y me dirigí a la cocina.
-Kim: ¿Mamá?.
Al llegar a la cocina vi una nota pegada en la nevera con un imán, agarré la nota y la leí.
"Hija he
salido a comer con unas amigas, te he dejado
comida en la nevera, solo tienes que calentarla, yo volveré
antes del toque de queda, te quiero hija".
Debo de decir que en este pueblo había un dichoso toque de queda y a partir de las ocho de la tarde no se podía salir a la calle, mas que nada era para los niños, ya que en estos últimos meses estaban desapareciendo bastantes, así que el ayuntamiento junto con la policía acordaron poner ese toque de queda sobretodo para los niños, pero las perdonas mayores tampoco estaban por la calle al oscurecer, de noche las calles estaban desiertas y muy pocos mayores se atrevían a salir.
Bueno pues yo me moría de hambre así que abrí la nevera saqué un cazo con arroz y lo puse a calentar, tras unos minutos me serví en un plato y me senté a comer.
Al acabar de comer lavé los trastos y subí a mi habitación, me senté al escritorio y comencé a hacer los deberes, de vez en cuando miraba por la ventana que estaba enfrente del escritorio.
Tras unos minutos decidí tomar un descanso así que dejé el boli sobre el escritorio y me senté hacia atrás en el silla, saqué una chocolatina del cajón del escritorio, la abrí y le di un mordisco mientras miraba por la ventana, en ese instante en la esquina de enfrente de casa vi a un payaso con un montón de globos rojos, no le di mas importancia tss habrá algún circo cerca y ese payaso esta haciendo propaganda del dichoso circo, la verdad a mi no me gustan ni los circos ni los payasos, odio a los estúpidos payasos.
Debo de decir que en este pueblo había un dichoso toque de queda y a partir de las ocho de la tarde no se podía salir a la calle, mas que nada era para los niños, ya que en estos últimos meses estaban desapareciendo bastantes, así que el ayuntamiento junto con la policía acordaron poner ese toque de queda sobretodo para los niños, pero las perdonas mayores tampoco estaban por la calle al oscurecer, de noche las calles estaban desiertas y muy pocos mayores se atrevían a salir.
Bueno pues yo me moría de hambre así que abrí la nevera saqué un cazo con arroz y lo puse a calentar, tras unos minutos me serví en un plato y me senté a comer.
Al acabar de comer lavé los trastos y subí a mi habitación, me senté al escritorio y comencé a hacer los deberes, de vez en cuando miraba por la ventana que estaba enfrente del escritorio.
Tras unos minutos decidí tomar un descanso así que dejé el boli sobre el escritorio y me senté hacia atrás en el silla, saqué una chocolatina del cajón del escritorio, la abrí y le di un mordisco mientras miraba por la ventana, en ese instante en la esquina de enfrente de casa vi a un payaso con un montón de globos rojos, no le di mas importancia tss habrá algún circo cerca y ese payaso esta haciendo propaganda del dichoso circo, la verdad a mi no me gustan ni los circos ni los payasos, odio a los estúpidos payasos.
Di otro mordisco a
la chocolatina y seguí mirando por la ventana, volví a mirar hacia
la esquina pero el payaso ya no estaba ¿que? ¿donde ha ido? Joder
ha desaparecido, pero solo he apartado mi mirada de él unos
segundos, es imposible que le haya dado tiempo a irse tan rápido.
Me froté los ojos y
volví a mirar, el payaso no estaba, uh creo que estoy cansada y
estoy viendo visiones. Me acabé la chocolatina y seguí con mis
deberes, pasaron unas cuantas horas y ya estaba oscureciendo, al fin
acabé los deberes así que recogí los libros y preparé la mochila
para mañana. Bajé al salón para ver un rato la tele, al llegar me
senté en el sofá agarre el mando y encendí la tele, en las
noticias estaban hablando de otro niño desaparecido, joder como siga
así este pueblo se va a quedar sin niños, cambié de canal varias
veces hasta que encontré un canal donde estaban poniendo una serie
de policías, ahí lo dejé creo que veré esa serie.
Pasó un rato miré
mi relejo y ya eran las ocho y media ¿donde estará mi madre? Ella
dejó escrito en la nota que vendría antes del toque de queda y ya
hace media hora de este y mi madre no ha llegado aun, tss seguro que
se ha entretenido con sus amigas, yo seguí viendo la tele, tras
media hora ya eran las nueve y a mi me estaba entrando ya hambre, mi
madre seguía sin aparecer.
Me levanté del sofá
y me dirigí al baño, hice pis y volví al sofá, nada mas sentarme
en este sonó el teléfono.
Me levanté del sofá
y caminé hacia el teléfono que estaba en la mesa del pasillo de la
entrada, al llegar a la mesa agarré el teléfono y contesté.
**Conversación
Telefónica**
-Kim: ¿Hola?
-Mel: Hola hija.
-Kim: Mamá ¿donde
estas?
-Mel: En casa de mi
amiga, hija te llamo para decirte que me voy a quedar a dormir en su
casa.
-Kim: ¿Y eso por
que mamá?
-Mel: Por que su
marido hoy tenia turno de noche y pues a ella le da miedo quedarse
sola en casa, con todos esos secuestros de niños mi amiga siente
terror de quedarse sola en casa, así que le he dicho que me quedaré
con ella.
-Kim: Pero mamá…
-Mel: Hija tienes 18
años, ya tienes edad de quedarte sola en casa, ademas solo será una
noche, no te preocupes. Si necesitas algo no dudes en llamarme, ya
sabes donde estoy.
-Kim: Si mamá.
-Mel: Buenas noches
hija, yo se que estarás bien.
-Kim: Esta bien
mamá, buenas noches y saluda a tu amiga de mi parte.
-Mel: Así lo haré.
Oh perfecto esta
noche me quedo sola en casa, uh que pocas ganas.
Colgué el teléfono
y volví al sofá, uh tenia mucha hambre así que me dirigí a la
cocina, pero allí no había nada preparado para comer, suspiré y
caminé de nuevo hacia el teléfono, llamé a la pizzeria de la
esquina y pedí una pizza familiar, si habéis leído bien he pedido
una pizza familiar, y os preguntareis ¿para que una pizza tan grande
si solo va a comer ella? Con una pizza pequeña le basta, pues no me
basta, lo confieso soy una glotona así que me comeré la pizza
familiar yo sola jeje.
Tras pedir la pizza
caminé hacia el sofá y me senté a mirar la tele, pero entonces oí
ruidos que provenían de la calle, no se que era sonaban como golpes,
me asomé a la ventana y vi al vecino montado en el tejado de su casa
dándole golpes a la antena, jaja se le habrá roto, miré de nuevo a
la calle y enfrente de casa vi al mismo payaso de esta tarde, parado
frente a mi casa complemente quieto, observaba hacia el frente, yo
rápidamente cerré las cortinas y me aparté de la ventana, sentí
un escalofrío por mi cuerpo, joder era aterrador.
Me senté en el sofá
intentando convencerme de que había sido otra de mis alucinaciones,
vaya hoy estoy bastante delirante jejej, veo payasos, ¿enserio? ¿lo
veo yo? ¿o en realidad estaba ahí?
Ante esa pregunta me
levanté del sofá y me dirigí de nuevo a la ventana abrí un poco
la cortina y miré hacia fuera, allí no había nadie, el payaso ya
no estaba y el vecino seguía en el tejado arreglando la antena, que
cosa tan rara ¿el payaso era real, o solo lo veía yo? ¿sería
producto de mi imaginación? Y si es producto de mi imaginación ¿por
que leches veo un payaso? Uh no se que leches me pasa hoy, creo que
esperaré a la pizza me la comeré y me iré a dormir, quiero que
este extraño día acabe pronto.
Para ver el listado de capítulos pulsa sobre la imagen 👇👇 |
No hay comentarios:
Publicar un comentario